Nuestro modelo BBVA-GAIN apunta a una leve moderación del crecimiento,
hacia tasas trimestrales ligeramente inferiores al 1% t/t en 2S18, en línea
con nuestras previsiones de crecimiento del 3,8% en 2018.
La actividad industrial ha perdido impulso -en parte esperado por el
fuerte ritmo de crecimiento registrado a finales del año pasado-, y el aumento del proteccionismo
podría estar pesando sobre la confianza, el comercio global y la inversión. Además, parece que
se consolida un crecimiento más moderado del gasto de los hogares.
Aumentan las diferencias en el desempeño económico por regiones: en EE.UU., la demanda
interna continúa impulsada por los estímulos fiscales y la fuerte creación de empleo. La
normalización de la Fed y los desequilibrios idiosincráticos de algunos países ha propiciado una
revaluación de los riesgos y un aumento de las tensiones financieras en las economías
emergentes. En China y la Eurozona el crecimiento parece haberse estabilizado y sortea la
creciente incertidumbre.
El aumento de la inflación se ha moderado de forma generalizada durante los últimos meses
debido a la evolución del precio de las materias primas. La inflación subyacente sigue contenida
en la mayoría de las áreas, pero se espera que aumente de forma gradual debido a la
disminución de la capacidad ociosa en las economías avanzadas y a la traslación de la
depreciación de la moneda en las emergentes.
Los riesgos son a la baja, principalmente debido a la incertidumbre política, a las
vulnerabilidades en emergentes y sobre todo al aumento del proteccionismo, a pesar de los
avances en las reuniones bilaterales entre EE.UU. y la EZ y las negociaciones del NAFTA.